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Violencia Machista en los Medios de Comunicación y Expresión

Parte 1: La Música


Todos los días pongo atención a la música que escucho; la que elijo, la que suena en el radio, la que aparece en televisión, la que me sugiere spotify, la que comparten mis contactos en redes sociales.


La música es arte, es un medio de expresión, sí, pero ¿qué se expresa? Una ideología[1] en la que intervienen: creencias, costumbres, hábitos, emociones, experiencias de vida. En definitiva, el patriarcado se encuentra presente en muchas propuestas musicales de ayer y hoy. Basta con señalar algunos ejemplos. Hace unos días fui a un bar en la pequeña ciudad que habito, un bar de ambiente “rockero”, entre la variedad de canciones que escuché se encontraba “La Ramera”, también conocida como “La Planta” merecedora de varios covers. Imposible ser objetiva ante este suceso, me pongo a observar las reacciones de quienes están presentes, meserxs, clientes, mis acompañantes y mientras río de incredulidad veo a varias personas cantándola a todo pulmón. Sí, ya estamos en el 2016, nada ha cambiado. Hace muchos años cuando era adolescente yo también la cantaba, y trato de entender que no todxs vivimos los mismos procesos. Pero es inevitable incomodarme cada vez que la escucho:

“ y que un sólo jardinero recoja el fruto no como tú que ya estabas recogida y si es que otro se anima pues buena suerte a ver si no se espina y te pareces tanto a una enredadera en cualquier tronco te atoras y le das vueltas con tus ramitas que se enredan donde quiera y entre tanto ramerío ya te apodamos - la ramera”


“¿Ya estabas recogida?” “¿en cualquier tronco te atoras?” Seguimos reproduciendo el patriarcado en nuestras canciones, mientras en el mundo, en nuestro país todos los días las mujeres vivimos el acoso sexual callejero. Mientras nos repiten que son simples piropos, que debemos responder con una sonrisa. Mientras muchísimas mujeres son violadas por sus propias parejas, por desconocidos en las calles, en fiestas, en bares. Culpadas por su vestimenta, o porque han bebido “de más”. Claro, la cultura de la violación, esa que justifica actos atroces (violación sexual/feminicidio). Siento nauseas y rabia mientras escribo esto. Ahora va el siguiente ejemplo, hace unos días escuchaba el radio, una estación muy sonada en mi ciudad. Empieza una canción, es la primera vez que la escucho, Jesse & Joy ft. Alejandro Sanz:


“¡Ay, ay! Mejor doy un paso atrás (ella)

Si te quitas los tacones corres mucho más (él)

¡Ay, ay! Aunque me interesa no soy una de esas que tan fácilmente se deja enredar.”


¡Demonias! “no soy una de esas que tan fácilmente se deja enredar” ¿qué mensaje transmite esta frase? ¿cuáles (de acuerdo a esta perspectiva) son/somos esas mujeres que tan fácilmente se dejan enredar? Aquellas/nosotras a las que llaman zorras, putas, fáciles, entre otras, ¿por qué? Por vivir nuestra sexualidad libremente, por tomar nuestras propias decisiones. Claro, porque aún permanece la idea de que las mujeres “debemos” vivir confinadas a una moral sexual, hasta llegar al matrimonio e incluso llegando a éste, nuestra sexualidad “deberá” continuar siendo confinada a la recámara matrimonial. Por otro lado, los hombres tienen socialmente permitido vivir una sexualidad libre y no son juzgados de la manera en la que las mujeres somos juzgadas/estigmatizadas si vivimos nuestra sexualidad libremente.


En mi playlist suena Andrés Calamaro, una de esas canciones viejas que ya ni disfruto pero sigue ahí porque me da pereza dedicar tiempo a eliminar canciones. “Tu parte de adelante” ¿Cuál? ¿La mía? (¡La tuya pinche Andrés!):


“ Soy vulnerable a tu lado más amable Soy carcelero de tu lado más grosero Soy el soldado de tu lado más malvado Y el arquitecto de tus lados incorrectos Soy propietario de tu lado más caliente Soy dirigente de tu parte más urgente Soy artesano de tu lado más humano Y el comandante de tu parte de adelante Soy inocente de tu lado más culpable Pero el culpable de tu lado más caliente Soy el custodio de tus ráfagas de odio Y el comandante de tu parte de adelante.”



Él como hombre, es carcelero de nuestro (mujeres) lado más grosero, es el soldado de nuestro lado más malvado (¿nuestra vulva?) propietario, dirigente, artesano, custodio y comandante de nuestra parte de adelante: sí, VULVA. Pero si mi vulva no es para que este patán la esté nombrando como quiera, ¡no! No es suya, ni del Estado, es mía. Ah, pero al final es inocente y vulnerable a nuestro lado más “caliente”, porque #asísonellos … dejarán de ser hombres. Y con esta frase de “dejarán de ser hombres” hago memoria de una anécdota en mi vida. Tenía 19 años y un ex novio me “puso el cuerno”, su madre se enteró y habló conmigo para decirme que a veces las mujeres debemos tolerar ciertas cosas, y que lo dejara pasar. Lo dejé pasar, lo volvió a hacer (obviamente). Pero, insisto, ellos son libres de expresar/vivir su sexualidad mientras nosotras somos estigmatizadas por hacerlo.


Enero 2016, en diversos espacios (televisión, radio, bares) suena una canción, es pegajosa, hasta dan ganas de bailarla. ¡Ah! pero, espera, la letra, el video. ¿Habla de amor romántico (patriarcal por supuesto)? ¿habla de violencia en las relaciones de pareja?


“Cuando no la llamo Siempre me hace reclamos Discutimos, peleamos Pero llego a casa en la noche La molesto y arreglamos Ah ah ah, ah ah ah Peleamos, nos arreglamos Nos mantenemos en esa pero nos amamos Ay vamos Ah ah ah, ah ah ah Qué pena me daría No tenerte en mi vida, vida mía, mami…”


*Si él no la llama, ella le reclama: (Claro, porque las mujeres estamos necesitadas de afecto y si él no nos llama moriremos en desamor).

*Discuten, pelean, pero al final él la “molesta” y se arreglan: (Claro, porque el amor romántico es así ¿no? trágico, con pleitos y discusiones de por medio, de lo contrario sería aburrido, sin chiste ¡que lío! “No importa si estás lejos Siempre te siento presente Y estoy pendiente de ti frecuentemente Cuando estoy en la calle Resolviendo mis problemas Es pa' nuestro futuro Yo no sé por qué me celas No soy un santo Tampoco ando en cosas malas Cuando no estoy contigo Es porque ando con mis panas Somos polos opuestos Y por eso nos gustamos Qué más le vamos a hacer Si así nos enamoramos Y ahí vamos.”


Él por supuesto está pendiente de ella, porque ella necesita que la cuiden, la protejan.

Él va a “la calle” a resolver sus problemas para el futuro de ambxs, como buen proveedor de cuidado e ingreso económico. Claro porque TODAS las mujeres eso buscamos y necesitamos, un hombre cómo J. Balvin. (HAHA) #QueAscoDeveras Todos los días yo la tengo que ver Así peleemos primero, mi mujer Mami, no me celes tanto Que yo siempre me conmuevo con tu llanto Nena, nena, tranquilícese... Que en la calle a nadie besé Yo solo tengo ojos pa' usted Relájate, despreocúpate Nena, nena, tranquilícese... Que en la calle a nadie besé Yo solo tengo ojos pa' usted Relájate, despreocúpate Que ahí vamos

Su mujer, propiedad de él y de nadie más, porque las mujeres somos objetos de posesión. (Patriarcado interiorizado y exteriorizado, también ¿Por qué no?)

Ella llora desconsolada por los celos, él le pide que se tranquilice, que se relaje: Llamar a una mujer histérica, dramática o exagerada es un acto de violencia machista, atenta directamente contra su cuerpo, contra su intelecto y valor como ser pensante y autónomo, como si fuéramos seres no racionales, como alguien que se deja llevar únicamente por sus emociones e intensifica sus reacciones, cayendo incluso en la histeria, en la enfermedad mental socialmente normalizada en mujeres desde hace varios siglos. Pedir/demandar/sugerir que nos tranquilicemos-relajemos y todos sus sinónimos nos lleva sutilmente a todo lo anterior. No gracias, J. Balvin.



El tercer álbum de Panda “Para ti con desprecio” publicado en 2005, se trata de una compilación de títulos dirigidos a una ex pareja (mujer) los temas son escritos a manera de carta, cada uno de ellos dedicados con odio feminicida. Aunque cada uno de los temas expresan violencia machista, elijo uno en especial “Disculpa los malos pensamientos”:

“Estas manos, de rojo están manchadas por todas las veces que yo en mi sueños te he asesinado con tanta pasión. Enjuagaremos, aquellas veces que dijiste que me amabas un poco de veneno y aguarrás sumérgete un poco mas. Porque tu muerta ya estas muertas estarás puedes estar tranquila pues solo en sueños me atrevo a matar (…)

De rojo te ves bien combina con tus ojos y tu piel de rojo te ves bien rojo sangre”

*¿Sólo en sueños se atreve a matarla? Claro, pero el chico necesita expresarlo, hacerle llegar a ella un mensaje explícito, “sólo en mis sueños lo haría, pero tengo el poder de hacerlo” porque #machofeminicida en un mundo patriarcal en donde el amor romántico como ejercicio de control en una relación de dominación/subordinación a través del vínculo afectivo/amoroso es una mezcla letal para nosotras, las mujeres.

El primero de enero 2014 se publica una canción de Los Tres, se titula Hey Hey Hey. El contenido de la canción lleva un mensaje explícito de contexto feminicida. Está claro, no deja nada al aire:

“Tráeme la escopeta porque le voy a disparar Al amor de mi vida que me acaba de traicionar. Se arrancó con un hombre que ahora es un nuevo galán Me dejó como un perro y ahora tendrá que pagar. El cielo está nublado y enojado como yo. Hey hey hey Eso es lo que pasa por creer y por amar. Hey hey hey Tengo mil balas y las voy a disparar. La tierra está mojada con lagrimas que corren por mi ser. El pavimento rojo con la sangre que voy a hacer correr. Le dije mil veces que no me abandonara Y ahora su destino lo decido yo”


Lo mismo pero más claro, amor romántico como un pretexto para el macho feminicida, el video es extremadamente fuerte, simula el feminicidio completo, y ahora su destino lo decide él por haberlo abandonado, porque nuevamente, persiste la idea de las mujeres como objetos de posesión, propiedad privada, carente de raciocinio y siempre objeto, nunca sujeto de nuestra propia vida. Porque para el sistema heteropatriarcal/capitalista nuestras cuerpas no nos pertenecen. Ahí empieza toda violencia, el poder sobre nuestrxs cuerpxs.






“La música es un vehículo también para la crítica y el cambio, pero es preocupante que las canciones de mayor circulación en el país tengan estas letras.” (Sosa, Dahlia: 2016)



Ahora, ¿qué canciones te vienen a la mente después de leer este texto? Infinidad ¿no?

[1] ¿Será necesario pluralizarlo y hablar de IDEOLOGÍAS?

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